Para cuidar la buena aplicación, acercamiento y proceder de los servidores públicos hacia actos de corrupción, se llevó a cabo la inauguración del Curso-Taller de Planificación Participativa “Testigos Protegidos Denunciantes de Actos de Corrupción”, tema importante a tratar debido a que el 12 por ciento de las personas que denuncian expresan el miedo a represalias, lo que genera poca participación en denuncia.
Así lo informó el titular de la Unidad de Operación Regional y Contraloría Social de la Secretaría de la Función Pública, Jesús Roberto Robles Malof, en compañía del secretario de Contraloría estatal, Cesar Román Mora Velázquez, quien además detalló que en Hidalgo se han presentado alertas en el Sistema de la Corrupción Pública relacionadas con programas federales en la zona de la Huasteca, específicamente, entrega de efectivo han seguido cobrando lo conocido como “piquete de ojo”, porcentaje del dinero de las personas.
Señaló que de septiembre a diciembre del año pasado se tienen 40 denuncias en la zona antes mencionada, y si bien un monto es pequeño es una situación inaceptable ya que la mayoría de estas ayudas beneficiaban a personas de la tercera edad y con capacidades diferentes.
Detalló que dentro de las denuncias se les refiero un retenimiento cerca del 20 por ciento, y quienes se quedan estos recursos son los conocidos como “servidores de la nación” al ser ellos los que entregan en el último trámite, ya que se encuentran habilitados para realizar la entrega mencionada.
El funcionario federal, comentó que él labor del órgano que maneja se encarga de juntar un conjunto de alertas fue informar a la Secretaría de Bienestar para que pudieran juntar los datos para evitar alertar a aquellos que realizan dichas acciones de corrupción.
Explicó que las alertas surgieron mediante un sistema informático “Alertadores de la Corrupción” donde se pueden interponer las denuncias de manera anónima y solo se consideran un indicio, para posteriormente realizar una investigación y saber si realmente sucede.
Por lo anterior y finalmente, aseveró la necesidad de dar una certera seguridad a quienes fungen como testigos; persona que puede o no participar en un acto, si lo hace da testimonio, además del alertador; denunciante que ni participa en el hecho.
Por Itzell Molina