Las puertas de las iglesias en Hidalgo están abiertas por decisión de las autoridades religiosas, no obstante, la actividad de los templos continúa con restricciones debido a la emergencia sanitaria por Covid-19.
Hasta este momento, el aforo permitido es de únicamente 30 por ciento de la capacidad total de los recintos sacros; además se aprovechan espacios al aire libre y el uso de las plataformas virtuales mediante las cuales se comparte la eucaristía.
De acuerdo a la Arquidiócesis de Tulancingo, los templos permanecerán abiertos debido a los tiempos que atraviesa el país en los cuales algunos feligreses necesitan de apoyo y consuelo.
Por Eunice L. Rodriguez