Alberto Witvrun.- El informe de labores legislativas de la senadora y secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Alma Carolina Viggiano
Austria, cumplió con su responsabilidad de rendir cuentas y como los foros son pocos
donde pueden reunir a un nutrido grupo de militantes el endeudado “Cubo de Colosio”
sirvió de marco para “ungir” como potencial candidato a la gubernatura a su mayordomo
político Marco Antonio Mendoza Bustamante.
Postulación que tal vez no se concrete, pero que envía un claro mensaje de que nadie
fuera de la cofradía que domina a este instituto político tendrá facilidades por más
trayectoria, mérito, historia y trabajo para postularse, así que a buen entendedor pocas
palabras y ya pueden poner en un archivo muerto su curricula de cargos y requisitos para
el 2028 porque en el PRI “Habemus candidato”.
Una señal de que las cuarteaduras en el PRI cada vez son mayores, es que personajes que
juran y perjuran que nunca abandonarán las filas tricolores, no acudieron a rendir pleitesía
a la originaria de Tepehuacán de Guerrero, ni los dos ex gobernadores que siguen en el
PRI, tampoco algún representante de Huichapan ni el considerado principal activo que aún
tienen en Pachuca, asistieron.
Diría un ex priista fue una reunión de cuates, que le allana el camino para que consoliden
negociaciones o terminen de convencerse algunos personajes que nada tienen que hacer
en el Revolucionario Institucional, lo que quedó de manifiesto en el encuentro que
sostuvo José Antonio Rojo García de Alba una semana atrás con personajes políticos de la
región Tula.
Nada para sorprenderse si en las semanas o meses siguientes el éxodo tricolor aumenta y
será evidente en el sector agrario, en Pachuca y Tulancingo principalmente, porque no
pertenecen ni quieren ser parte de la cofradía que por su parte no quiere voces críticas y
menos contrapesos porque el PRI, este PRI tiene jefa.
