Alberto Witvrun. – De vuelta a Casa Rule de Barcelona Sergio Edgar Baños Rubio se encontró con otra crisis en el ayuntamiento por acciones desaprensivas, inopinadas, torpes y erróneas de su secretario general Waldo Genoni Pedraza García que se auto erigió “denostador” de medios y periodistas para los que tiene expresiones ofensivas que tocan la vida privada porque le señalan o revelan sus yerros.
Metió en serio problema a su jefe y amigo por violencia política de género por la demanda de la regidora Olivia López Villagrán al no considerar la moción para que compareciera la síndica procuradora hacendaria Erika Trujillo; también por él, recibió el ayuntamiento observaciones de la Auditoria Superior del Estado (ASEH) por “apoyos de gestión” que en el caso de Trujillo alcanzan los 50 mil pesos mensuales sin comprobar, que “salen” de la oficina de Pedraza García.
Si no fuera grave sería risible que sin informar a la asamblea ordenara subir la nómina de nivel 7 a 9 al hermano de la síndica Oliver Trujillo que se despeña en adquisiciones, en lo que es un contubernio entre ambos, comentario cotidiano de regidores, funcionarios y trabajadores cuyo dirigente no deja de señalarlo como culpable de la mala relación con el alcalde.
Esto se suma al señalamiento no aclarado de pedir “comisión” a Carlos Malanco Aguilar de un millón de pesos para gestionar una factura de la empresa Camla por concepto de uniformes que no pagó el gobierno de Yolanda Tellería Beltrán de 2 millones 108 mil 160 pesos, además de los escándalos en estado de ebriedad en un par de restaurantes.
Para justificar estos señalamientos de periodistas y medios Waldo Genoni filtra documentos internos del ayuntamiento sobre convenios o facturas por publicidad para “exhibir” a sus críticos cuando se pueden solicitar por transparencia al ser contratos legales, pero su diferendo con los medios y periodistas no llega ahí.
El secretario de marras hurga en la vida privada de periodistas para desquitarse y dice a su círculo que revelará vídeos de columnistas en situaciones comprometidas, lo que de cierto le generaría denuncias penales; analizando medios ninguno toca su vida privada, mientras hay pruebas de sus “mensajes” a medios y periodistas lo que tarde o temprano debe aclarar en público este denostador de quinta.
Si la lógica política tiene aplicación en los conflictos generados por el ixmiquilpense en su desplante de poder e incapacidad política, algo está obligado a hacer Sergio Baños Rubio con su amigo y subordinado que le genera problemas por todos lados o será el presidente municipal quien pague el costo político.