Miguel Á Martínez / Tula de Allende. Damnificados de la inundación de septiembre de 2021 en el primer cuadro de Tula centro y nueve más de sus localidades, aún guardan la esperanza de que se les proporcione otro apoyo gubernamental para «levantarse» de la ruina y miseria en que los dejó la emergencia.
A más de un año de ocurrida la anegación, que arrojó un saldo oficial de más de 35 mil damnificados y pérdidas económicas que ascienden a 2 mil 50 millones de pesos aproximadamente, continúan las quejas entre los afectados por la mala atención que recibieron de los tres órdenes de gobierno.
Para Aolinaria Jacob Villegas, oriunda de Chiapas, pero avecindada desde hace más de 35 años en la Ciudad de los Atlantes, una buena parte de los afectados pertenecen al sector de la tercera edad, por lo que difícilmente son contratados para un empleo, lo cual los lleva a no tener ingresos para reponer todo lo que perdieron en dos horas durante la noche de la tragedia.
En este sentido, la vecina de la calle Leandro Valle del centro, indicó que mantienen la esperanza de que se les proporcione otro apoyo de la administración federal o estatal que les sirva para terminar de salir adelante, ya que del municipio están seguros no les ayudarán con nada.
Dijo confiar en que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), no los dejará en el abandono y sumidos en la destrucción en la que aún se encuentran, con paredes humedecidas y restos del lodo del río Tula en patios y áreas comunes.
Respecto al estado, se esperanzó en que, ahora con el reciente cambio de gestión y de colores, el gobernador Julio Menchaca Salazar se toque el corazón para ayudarles de alguna forma.
Cabe resaltar que tres meses después del desbordamiento del río Tula, los damnificados recibieron del gobierno federal 10 mil pesos en efectivo, una base de cama, un refrigerador y una estufa como indemnización por las pérdidas sufridas, a pesar de que en algunos casos fueron millones de mermas.
La noche del 6 y madrugada del 7 de septiembre de 2021, comenzó la inundación de Tula y nueve de sus localidades, misma que se mantuvo por al menos 3 semanas, el siniestro dejó a más de 35 mil damnificados, 17 fallecidos y daños económicos por más de 2 mil 50 millones de pesos.
A un año de la anegación, ha sido escaso el apoyo de autoridades de los tres niveles de gobierno, hoy la ciudad de Tula está casi en ruinas, con una grave crisis económica a cuestas.
Desde un principio, en la sociedad civil de Tula ha habido la creencia de que la inundación en Tula fue provocada, y por eso el cuestionamiento es por qué se sacrifica a unos para salvar a otros.