Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Resurgió la firme oposición de un grupo de comerciantes establecidos de la ciudad, ante la próxima apertura de una nueva tienda de conocida cadena nacional, cuya construcción prosigue en un predio del barrio de San Antonio, ubicado en las cercanías de la zona centro de la cabecera municipal.
Constituidos como Unión de Uniones de Comerciantes de Ixmiquilpan, los inconformes aclararon estar a favor del desarrollo y modernidad del municipio, pero en contra de ese tipo de tiendas departamentales, señalando a algunas de incurrir en explotación laboral, evasión de impuestos e incumplimiento de pago de servicios básicos.
Advirtieron que aquel colectivo está integrado por 16 organizaciones de comerciantes, significando en promedio 10 mil integrantes de familias ixmiquilpenses que subsisten de la tablajería, pollería, abarrotes, zapaterías y venta de ropa, lo mismo que de los antojitos mexicanos, dulcería y panadería, entre otros giros.
En ese contexto, adelantaron que recurrieron a un amparo para la no apertura de la tienda departamental, por “violación a los derechos humanos”, porque en la cabecera municipal se cuenta con importante presencia de pobladores de las comunidades Hñahñu, que tienen el derecho a la libertad de comercio.
Señalaron además que, previo a la apertura del nuevo establecimiento comercial, no se realizó una consulta de impacto social, entre los habitantes de la zona y menos con los vecinos del barrio de San Antonio, do0nde cada lunes se instala el tradicional tianguis y cuyos vendedores resultarían afectados con aquel proyecto mercantil.