Miguel Á. Martínez. Tula de Allende.- Familiares y amigos de A.E.C., sexagenario que perdió la vida el 11 de enero por el atropellamiento de un camión de volteo asignado a la obra del Plan Hídrico, acusaron que la empresa Virgo huiría de la demarcación para evadir su parte de responsabilidad por su fallecimiento.
Después de que el peritaje, que tardó en resolverse casi dos meses, determinara que la muerte de A.E.C. se diera luego de ser arrollado (homicidio imprudencial), y que la firma en comento junto con la Comisión Nacional del Agua y los camioneros debieran pagar una indemnización por la privación de la vida, la compañía se marcharía de Tula para no responder, denunciaron.
Si se concretara el caso, como sospecha la familia de deudos, Virgo dejaría el tramo 2 de los trabajos del río inconclusos, además que también sería el caso con diversas reparaciones de infraestructura urbana previamente pactadas con los pobladores de la comunidad 16 de Enero, como reconstrucción de calles y banquetas.
Es decir, hasta el pasado lunes durante la manifestación que desarrollaron, se negaban a cumplir los acuerdos signados en cuanto a una indemnización a la viuda de la víctima.
Rosa María Espíndola, hija del finado, manifestó su temor y preocupación de que en cualquier momento la empresa en mención retire su maquinaría (retroexcavadoras, compactadoras) y emprenda la huida, como ya hizo en 2022 la empresa Conaisa, a la que presuntamente se le pagaron labores de construcción de muros en el río Tula que no se ejecutaron.
La misma fuente de información reveló que se pudieron enterar que este sábado serán dados de baja un total de 25 obreros por instrucciones de la empresa y por motivos que hasta el momento desconocen.
Cabe recordar que en enero pasado el titular de la Conagua, Germán Martínez Santoyo, dio a conocer que será el mes de mayo próximo cuando concluya la segunda fase de la rectificación, ampliación y revestimiento del río Tula.