Miguel Ángel Calero Rodríguez, portero colombiano que dejó legado en la Bella Airosa, hoy cumple seis años de fallecido, aunque el recuerdo en los aficionados se mantendrá permanente.
Un 4 de diciembre, pero de 2012, el “Cóndor” emprendió el viaje a la eternidad, a causa de un infarto cardiorrespiratorio, que llegó luego de diagnosticarle muerte cerebral por la retrombosis que sufrió días antes.
Ese día su cuerpo fue velado en el lobby del auditorio Gota de Plata; al día siguiente, se realizó una misa de cuerpo presente en el estadio Hidalgo, con miles de aficionados que le fueron a dar el último adiós al “Show”, como se le conocía en su país.
La directiva ha rendido homenaje al colombiano en un par de ocasiones, con la publicación de un libro y un momento en el estadio.
Calero llegó en el Invierno 2000 a la Bella Airosa; fue un líder nato que llevó al equipo a ganar cuatro títulos de liga, cuatro de Concacaf, la Copa Sudamericana; además, estuvo presente en tres Mundiales de Clubes.
El 29 de septiembre de 2011 anunció su retiro como profesional, jugando su último partido el 22 de octubre ante Pumas, el cual terminó en un empate sin goles.
Ahora, el legado del colombiano sigue presente a través de su hijo, Juan José Calero Sierra, quien debutó el torneo Apertura 2015 con los Tuzos; sin embargo, actualmente milita con los Esmeraldas del León.