Alberto Witvrun.- Conforme avanzan los días las estructuras morenistas que no la militancia se contagia de
la pandemia política EP24 (Elecciones Presidenciales 2024) virus comúnmente conocido como Corcholatitis Aguda cuyos síntomas es la incompatibilidad de proyectos y produce fracturas y divisionismo que puede producir la pérdida de poder y la desconfianza ciudadana.
La inoculación presidencial contra esta enfermedad al convocar a los Servidores de la Nación a protegerse contra los efectos de este virus en el Gota de Plata, parece no surtir efecto, porque las variantes Claudia, Marcelo, Adán y Ricardo de esta enfermedad cada vez contagian a más y más, amenazando con expandirse a la militancia.
Hidalgo es una clara muestra del contagio, las medidas para evitar los principales síntomas nadie las cumple, así unos presidentes municipales las disfrazan diciendo que poner de fachada una organización que tiene solicitud para convertirse en partido político estatal,
es suficiente para la variante Claudia no les afecte, por el contrario, les permitirá llegar sanos y salvos al 2024.
Otros más sostienen que están inoculados y por eso van con Adán y sin importar las
medidas se dieron el gusto de organizar una concentración de más de dos mil personas y
quienes dicen que van con el carnal haciendo caso omiso se concentraron semanas antes
en un salón y la variante más riesgosa porque de no encontrar la vacuna o el antídoto
adecuado es la más letal es la Ricardo que ha mutado de tricolor a sol azteca luego a
petista y hoy a morenista, bueno dicen que hasta panista.
Así que la pandemia de Corcholatitis Aguda puede causarle parálisis letal al movimiento
que hizo sanar después de 18 años de sortear toda clase de padecimientos a Andrés
Manuel López Obrador y por más que digan que sin estar en la boleta volverá a ganar la
presidencia el virus que sembró de manera por demás adelantada le están generado
arterosclerosis política a Morena.
