Miguel Á. Martínez. Tula de Allende.-Luego de que la madrugada del pasado sábado, un taxista del sitio Soriana, de iniciales O.A.H. de 30 años fuera asesinado de tres balazos por personas desconocidas mientras se encontraba de servicio en las inmediaciones del Hospital Regional Tula – Tepeji, en la colonia Jalpa, sus compañeros, exigieron que las autoridades municipales esclarezcan el hecho además de garantizar que el hecho no quede impune.
Mediante pintas en los medallones de sus unidades, le dan al finado, al que apodaban King Kong, el último adiós, al tiempo de pedir justicia, ya que se dijeron hartos de la inseguridad que representa su trabajo ante la falta acciones de seguridad de la Policía local.
En entrevistas separadas, conductores de diversos sitios, entre ellos Estrella Roja, Moderno, 5 de Mayo y Tula, todos del centro de la demarcación lamentaron la vulnerabilidad en que se encuentran ante la delincuencia y dijeron que, en este caso, como en muchos otros, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), siempre reacciona hasta que han privado de vida a un operador.
Pidieron reforzar la vigilancia en zonas como en la que se cometió el homicidio de su compañero, pues es un lugar oscuro y solitario por las noches y madrugadas, el cual carece de todo alumbrado público.
Los ruleteros, quienes pidieron el anonimato por temor a represalias, exigieron que el alcalde Manuel Hernández Badillo y al inspector de la corporación, Mario Vargas Soto, empiecen a dar resultados, y den la cara por la ejecución de su compañero.
Cabe resaltar que la de O. A. H. fue la segunda muerte violenta registrada en la demarcación, en un lapso de cinco días. El pasado lunes un hombre fue encontrado sin vida en las cercanías del rastro municipal, el cuerpo tenía los intestinos de fuera y presentaba huellas de tortura.