El ayuntamiento de Pachuca aprobó modificaciones al Reglamento de Panteones a fin de realizar un censo sobre el estatus de las fosas y normar la recuperación de aquellas en “total abandono” por falta de mantenimiento y pago de refrendo, a fin de disponer de esos espacios.
En su exposición de motivos el regidor Navor Alberto Rojas Mancera, promovente de la iniciativa, mencionó que actualmente el camposanto cuenta con 40 mil 492 fosas, de las cuales 32 mil 280 pertenecen a la sección de perpetuidad. Debido a que al mes se realizan en promedio 30 inhumaciones, en un par de años el sitio podría presentar una saturación que origine la clausura del mismo.
Los cadáveres deberán permanecer en sus fosas por regla general durante siete años, de conformidad con la legislación sanitaria. La exhumación de restos áridos se hará, transcurrido ese término y después se depositarán en el osario, previo aviso a los familiares, con excepción de aquellos que estén al corriente en el pago del refrendo.
En el caso de las fosas adquiridas a perpetuidad, después de 10 años sin que se haya efectuado el pago de derechos se considerarán como abandonados y el municipio recuperará el dominio sobre los espacios.
Para el mismo rubro, el reglamento establece que los responsables que no paguen de manera puntual se harán acreedores a una multa de dos veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) por cada periodo vencido.
Para las criptas que considerados monumentos valiosos, históricos o de personajes populares deberá promoverse la restauración y, de ser procedente, su reubicación con el cumplimiento de las normas sanitarias y trato digno de los restos, mismos que serán depositados en un osario en el que se establecerá la ubicación e identificación de los mismos.
Antes de las exhumaciones la Dirección de Servicios Municipales realizará un padrón sobre la situación de las tumbas y una campaña de difusión de 60 días para que los familiares acuden a realizar su refrendo.
Por Oliver García