Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. Sin dar cifras o elementos para sustentar sus dichos, el inspector de la Secretaría de Seguridad Pública, Mario Vargas Soto, aseguró que la incidencia delictiva en el municipio ha decrecido hasta un 50 por ciento.
En entrevista, señaló que la disminución se debe “al método” que han utilizado en los primeros meses de gobierno para reducir la actividad del hampa, aunque por cuestiones de seguridad no reveló la estrategia.
Añadió que un factor importante para la disminución es que se ha reforzado y mejorado la coordinación con fuerzas de seguridad de los dos órdenes de gobierno superiores: “hemos trabajado de excelente forma con los efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSPH), y con la Guardia Nacional (GN).
Dijo que los delitos que mayormente se cometían en la Ciudad de los Atlantes era el robo a casa habitación, el asalto, el robo a negocio y de vehículo, pero que todos estos han disminuido de manera importante.
Pese a los dichos de Mario Vargas, cabe resaltar que vecinos de colonias populares como Barrio Alto (primera y segunda sección), San José y El Carmen han solicitado el reforzamiento en los recorridos de vigilancia, dado que los crímenes en sus respectivos vecindarios van a la alza en una forma alarmante, aunque tampoco proporcionaron pruebas de sus dichos.
Si bien, el jefe policíaco aseguró que la incidencia de delitos comunes ha disminuido, reconoció que delitos federales como el huachicoleo persisten en la antigua Capital Tolteca, dado que, aunque su presencia es menor, no lo han logrado controlar, pero justificó que este fenómeno es responsabilidad del gobierno de la República.