Miguel Á. Martínez. Tlaxcoapan. A unos días de que se celebre el Día de Muertos, el panorama para la comercialización de flor de cempasúchil luce alentador para los productores de San Bartolomé Doxey en Tlaxcoapan y de San Francisco Bojay, en Tula.
Pese a las condiciones adversas que se tuvieron el año pasado, en que se vivió la crisis económica del Covid-19, lo que disminuyó hasta en un 45 por ciento la venta de flores para la conmemoración de los Fieles Difuntos, estiman que este 2021, ya parcialmente superada esa etapa, las transacciones por los productos de temporada aumentarán.
Más aún, este panorama alentador, de acuerdo con Ramón Trujillo e Iván Saldaña, ambos dedicados al cultivo de cempasúchil y variedades de flor de muertos como la nube, la crisálida y la manita de león, en San Francisco, dijeron que, dentro de algunos años podrán convertirse en floricultores de tiempo completo.
“Ya hemos tenido pláticas con algunos otros compañeros, pero necesitamos ver qué tanto apoyo podemos obtener de las autoridades de los tres órdenes de gobierno, para emprender esta aventura, con la que, si nos va bien, podríamos mejorar el ingreso de nuestras familias”.
Ramón Trujillo, insistió en que, en los campos del norte de Tula pueden mudar su actual vocación agrícola por un esquema de siembra de flor permanente.
Cabe recordar que la venta de cempasúchil para los productores de Tula se realiza sobre la carretera Tula – Tepetitlán aproximadamente en el kilómetro 2, en las proximidades de la pirámide del Corral de la zona arqueológica, donde empiezan los primeros cultivos de los productos.
El gobierno municipal ha intentado desde hace 4 años, durante la administración del exalcalde Gadoth Tapia Benítez, impulsar un festival del Día de Muertos en la comunidad de San Francisco, a fin de beneficiar a los productores locales, sin embargo, sólo se efectúo durante 3 años, luego con motivo de la emergencia sanitaria de coronavirus fue suspendido, y en este 2021, los campesinos no han tenido noticias de su organización.
Otro que quedó suspendido por segundo año consecutivo ante el virus SARS-CoV-2, fue el festival de la flor de la localidad de Doxey, Tlaxcoapan, donde los organizadores -entre los cuales se encuentra la exregidora Fanny Vargas Hernández- informaron que sólo se harán un par de actividades para no dejar perder la tradición ni el nombre de la actividad multitudinaria, que este año se realizaría en su octava edición.
La exedila recordó que, además de la venta tradicional flor, había expos artesanales donde se pudieron comprar manualidades propias de la festividad el cual tenía una gran respuesta, puesto que se daba lugar a puesteros de toda la región y que se recibían visitas incluso de otros estados.