Arturo G. Alanis. Santiago de Anaya.- El alcalde, Edigar Monter Ángeles, fue señalado de provocar un conato de enfrentamiento, en la comunidad El Palmar, donde acudió el domingo 26, en su pretensión de imponer a un nuevo titular de la delegación municipal; el ambiente de tensión requirió la presencia de policías locales y personal de la Guardia Nacional.
Reportes indican que esa mañana celebraban los pobladores una Asamblea General, a fin de nombrar a los nuevos representantes del poblado, así como para tratar otros asuntos de interés común, pero sorpresivamente llegó Edigar Monter, para “reventar” la reunión, pues se aseguró que quiere imponer en ese encargo a uno de sus incondicionales.
La intromisión del edil molestó a los habitantes, quienes no dudaron en reclamar y exigir explicaciones, por pretender imponer al nuevo delegado, razón por la cual huyó Edigar Monter, al tiempo que policías municipales replegaron a los inconformes; enseguida, hizo acto de presencia personal de la Guardia Nacional, para inhibir una confrontación mayor.
Por lo anterior, prevalecía la tensión social al interior de El Palmar, donde importante número de vecinos se pronunció en contra del alcalde, por violentar los Usos y Costumbres, al participar en la asamblea y pretender asignar al nuevo delegado sin el apoyo de la mayoría, así como por provocar la división en aquella comunidad.
A principios del presente mes, los mismos pobladores acusaron que Edigar Monter ya había transgredido los Usos y Costumbres de su comunidad, en su necedad de querer imponer un nuevo delegado, teniendo como fondo el presunto interés de involucrarse en los manejos de los recursos y proyectos que auspicia en favor de El Palmar la planta cementera que ahí opera.