Ángel Bautista. Huejutla de Reyes.- La escasez de agua ha desatado un conflicto creciente entre los barrios Ixtlahuatempa y San José, ambos en la comunidad de Chililico.
Lo que comenzó el lunes como un intento de conexión ilegal a la red de agua potable, ha escalado a enfrentamientos físicos, retenciones y un bloqueo vial, poniendo de manifiesto la urgencia de una solución.
El origen de la disputa se remonta al lunes, cuando el yerno de la delegada del barrio San José intentó conectarse a la red de agua, lo que fue impedido por habitantes de Ixtlahuatempa, desatando una trifulca que culminó con la retención de la delegada.
Aunque el martes se registró un intento de mediación en las oficinas de la Subsecretaría de Gobierno en la Huasteca, lo que parecía ser un acuerdo temporal se disolvió rápidamente. La mañana de este miércoles, la situación se agudizó cuando aproximadamente un centenar de personas de uno de los barrios, armados con machetes y palos bloquearon la avenida Revolución frente a la presidencia municipal. Su objetivo: exigir una audiencia directa con el alcalde José Alfredo San Román Duval.
Tras ser atendidos por personal del ayuntamiento, los manifestantes se retiraron, y la persona retenida fue finalmente liberada, pero la tensión persiste.
Las autoridades han instado a ambos barrios a llegar a un acuerdo sobre el acceso al vital líquido, advirtiendo que si siguen así la situación podría derivar en un enfrentamiento.
El desenlace de este conflicto por el agua en Chililico pende de un hilo, y la comunidad está en espera de una solución que evite mayores confrontaciones.