Erick Morales.- A pesar de que mantener contacto con la población es una de las funciones esenciales del trabajo legislativo, al menos nueve diputadas y diputados de la 66 Legislatura del Congreso de Hidalgo no han habilitado una oficina de atención ciudadana.
Entre quienes aún no cuentan con un espacio público para recibir gestiones o brindar servicios se encuentran legisladores electos por representación proporcional como Diana Rangel o Paloma Barragán, así como algunos de mayoría relativa, entre ellos ambos legisladores del PT, el dirigente del partido verde Avelino Tovar y el representante del PRD Leonel Perusquía. Aunque no existe una obligación formal para abrir este tipo de oficinas, su ausencia limita los canales de comunicación directa entre representantes y ciudadanía.
El presidente de la Junta de Gobierno del Congreso, Andrés Velázquez, reconoció que cada legislador tiene sus motivos, pero subrayó la importancia de mantener la cercanía con la gente. “Las casas de atención nos permiten escuchar, gestionar y trabajar con humildad”, señaló durante la apertura de su propia oficina en el centro de Pachuca.
Finalmente, Velázquez explicó que esta oficina representa una forma de mantener el vínculo con la población y de asumir el trabajo legislativo con humildad y enfoque social. «Tenía este compromiso pendiente. Esta casa es modesta, austera, como corresponde a su ubicación en el centro de la ciudad», comentó.