Guillermo Bello.- El desabasto de agua potable que generó protestas ciudadanas se resolverá con un plan integral que entrará en operación este año que incluye la perforación de seis pozos y la detección satelital de fugas que beneficiará directamente a alrededor de 200 mil habitantes de Pachuca, Mineral de la Reforma y Zempoala, además de la creación de la Policía Hídrica para evitar robos y saboteos a la red de distribución.
Los pozos proyectados beneficiarán a más de 107 mil habitantes de 98 colonias y fraccionamientos de los municipios antes mencionados con inversión de 282 millones de pesos que estarán ubicados en el bulevar Luis Donaldo Colosio, Zona Industrial La Paz, Juan C. Doria, Providencia, Matilde y Téllez que permitirán la extracción adicional de 185 litros por segundo.
El gobernador Julio Menchaca Salazar, dijo que con acciones como esta se responde a quienes, a inicio del 2023, se manifestaron con justa razón, ante el desabasto de agua que estaba afectando a colonias como El Palmar.
Sobre los trabajos técnicos se explicó que se sustituirán cinco líneas de distribución, dos de conducción de Pachuca y Mineral de la Reforma, de las cuales, se destacó la línea conducción de 24 pulgadas al tanque Abundio Martínez que cuenta con 45 años de antigüedad.
Y se iniciará el programa de localización de fugas vía satelital, en beneficio de más de 86 mil habitantes, que ayudará a detectarlas y a repararlas para la recuperación de 154 litros por segundo que se pierden en un aproximado de 950 fugas no visibles.
También se entregaron uniformes para los mil 115 trabajadores de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim), para lo que se destinaron tres millones de pesos, con lo que se incluyen equipos de protección.
Juan Evel Chávez Trovamala, director de la Caasim, anunció la creación de la Policía Hídrica, compuesta por 24 elementos, quienes se encargarán de vigilar las instalaciones, evitar el vandalismo, robo de cableado, manipulación de válvulas, entre otras, de igual forma, con una inversión de tres millones de pesos.
Los seis nuevos pozos tendrán una profundidad de entre 300 y 450 metros de profundidad, por lo que la excavación tardará aproximadamente cuatro meses, mientras que el equipamiento uno más, por lo que se tiene contemplado que antes de que culmine el año, entren en funcionamiento.