Alberto Witvrun.- Mientras el malestar crece en los 20 mil usuarios diarios de la ruta Téllez Hospitales por la incorporación de las Tuzocombis en lugar de las unidades Mercedes Benz que fueron embargadas por banco Santander en el Sistema Integrado de Transporte Masivo de Hidalgo (Simath) su director Humberto Cabrera Román no encuentran la forma de explicarle a la secretaria Lyzbeth Robles Gutiérrez porque no se evitó el embargo o bien se intervino la ruta se garantizó el servicio a la población.
No se entendió que la obligación y responsabilidad de la Secretaría de Movilidad y Transporte (Semot) es garantizar la movilidad de la población ya que de ella depende la productividad al permitir a la población llegar justo a tiempo a sus centros de trabajo y educativos como se justifica en la Ley de Movilidad y Transporte aprobada y promulgada en 2017, después del mal inicio con el primer titular Rufino de León Tovar.
Primero resulta extraño que nada se haya hecho cuando el director de Simath, estaba enterado del embargo de las 60 unidades, tanto que aprobó rentar instalaciones de la Semot para que el banco que exige el pago de 125 millones de pesos del crédito otorgado a los 171 permisionarios guardara los Midbus Toreto 2022.
Así en lugar de intervenir la ruta y mantener directamente el servicio de calidad, prefirieron argumentar falsamente una ampliación de ruta para “meter” las Tuzocombis con capacidad para 15 personas en la que por la demanda los usuarios tienen incluso que viajar de pie y encorvados, lo que pone en riesgo su integridad, lo peor es que se metieron en un callejón sin salida.
Para los permisionarios afectados, todo señala que fue intencional por parte de Simath no solo permitir sino facilitar el embargo, al rentar instalaciones donde permanecen los modernos camioncitos y urgen la intervención del gobernador para encontrar una solución que beneficie a todos.