Alberto Witvrun.- No obstante que el presidente municipal Sergio Baños Rubio se empeñó en darle una
salida digna a su segundo secretario general Waldo Genoni Pedraza García, las secuelas de
su turbio paso por la Casa Rule siguen brotando y ensuciando al gobierno capitalino,
pronto apareció la observación de la Auditoria Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) de
los apoyos que en efectivo este oscuro personaje daba a un grupo de regidores
empezando por la Síndica Procuradora Erika Trujillo Ortiz y que no comprobaban.
Beneficio que sólo recibían los leales sin importar partido, no así los que no obedecían
consignas en particular los identificados con el presidente municipal suplente Benjamín
Rico Moreno, lo grave es se intento ocultar la información porque este acuerdo esta
emparejado con posiciones en la estructura de gobierno para Trujillo Ortiz, entre ellos su
hermano gracias a las instrucciones de Pedraza García.
No sólo también se revivió el señalamiento directo del empresario poblano Carlos
Eduardo Malanco Aguilar quien acusó a Waldo Genoni Pedraza de solicitarle un “moche”
de un millón de pesos para liberarle un pago de 2 millones 108 mil 160.80 pesos que dejó
pendientes de pago la administración de Yolanda Tellería Beltrán por la compra de
uniformes y equipos de seguridad.
Malanco Aguilar se negó y prefirió acudir a los tribunales que resolvieron en el expediente
808/2022 a su favor y si bien en la demanda reclamó el pago de más de 2.5 millones por
intereses moratorios el juez mercantil únicamente aprobó se le pagara la suerte principal,
en un plazo no mayor de tres días y, aunque se negó que Pedraza García haya solicitado el
“moche” ahí queda el antecedente.
En tanto en el ayuntamiento en voz baja corre la versión de que han encontrado
irregularidades administrativas de Waldo Genoni Pedraza, desde que estuvo en la
Secretaría de Administración, pero se trata de “sanearlas” y evitar ruido innecesario en
esta etapa de ajustes en la administración municipal capitalina.
