Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. En seis días de paro forzado en la producción de cementos de la fábrica La Cruz Azul asentada en el antiguo Jasso, Tula, la empresa habría registrado ya pérdidas aproximadas de 75 millones de pesos.
A pesar de que no ha habido pronunciamiento oficial en el sentido de las mermas sufridas en casi una semana de inactividad, la estimación realizada por este medio se efectuó con base en datos proporcionados anteriormente por Alberto López Morales, presidente del Consejo de Vigilancia de la cooperativa.
En el marco del anterior paro de actividades, propiciado por la avería de la subestación eléctrica del 27 de abril, por parte de un supuesto grupo de choque contratado por “la disidencia” para tomar por la fuerza la fábrica de Tula, el directivo reveló que por día se dejaban de producir 5 mil toneladas de cemento, con un valor comercial de 12.5 millones de pesos.
La madrugada del pasado miércoles, la planta cementera, interrumpió súbitamente su producción derivado de un corte de energía realizado por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que obedeció a una petición del presidente del Consejo de Administración de la denominada disidencia, Víctor Manuel Velázquez Rangel.
Aunque desde el pasado viernes, el grupo que tiene en control la fábrica de Ciudad Cooperativa Cruz Azul, obtuvo el amparo 1265/2022, donde se ordena a la empresa de “clase mundial” a restablecer el servicio interrumpido, a la fecha el servicio todavía no se restablece, pero pudiera ocurrir en las próximas horas.
Y es que, de acuerdo a lo determinado, por el juez cuarto de distrito del estado de Hidalgo, la exparaestatal, tendría un plazo de 24 horas.
A la salida de Guillermo Billy Álvarez de la dirección de la empresa, José Antonio Marín Gutiérrez y Víctor Manuel Velázquez Rangel, presidente del Consejo de Administración y de Vigilancia reconocido como legal por la disidencia se disputan el control de la empresa con Federico Sarabia Pozo y Alberto López Morales, quienes se ostentan como representantes en los mismos cargos desde el 26 de agosto de 2020, donde fueron elegidos por los socios cooperativistas, a mano alzada y sin que hubiera Asamblea general de por medio.