Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. Guías de la zona arqueológica Tula y artesanos que ofertan sus productos al interior del antiguo centro ceremonial acusaron que la posible razón por la que, tras casi un año ocho meses, aún no se reapertura la Capital Tolteca, se debe a que tras más de dos años de presunta remodelación, el museo de sitio Jorge R. Acosta, aún no está terminado y dijeron que no se ve ni cerca la fecha de reinauguración.
Los quejosos, que prefirieron no identificarse “porque luego se enojan las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)”, reprocharon que en todo el tiempo que han estado suspendidas las actividades en la zona, ante la pandemia de coronavirus, no se haya avanzado en nada a los trabajos de rehabilitación.
Recordaron que todo el avance que se lleva se hizo antes de que se decretara la emergencia por el SARS – CoV – 2, y reiteraron que durante el año y medio de suspensión temporal no se ha hecho nada.
“Los trabajos de albañilería y obra negra del museo se acabaron como tal en febrero de 2019, y desde ese entonces no se le ha avanzado nada, está el puro edificio ya remodelado, pero todavía le faltan los trabajos de museografía y las vitrinas… nosotros sabemos que esas labores tardan, por lo que, si el motivo por el que no se ha abierto la zona arqueológica es este, no hay ni para cuándo re reinagure”.
Cabe resaltar que, de acuerdo con Refugio Godínez Gante, presidente de la Unión de Artesanos y Prestadores de Servicios de la Zona Arqueológica de Tula, la reapertura del recinto tolteca se esperaba para este viernes, porque se iba a aprovechar el puente del Día de Muertos para repuntar las visitas a la antigua Tollan, sin embargo, por motivos desconocidos no fue así.
Este medio recorrió la periferia del polígono arqueológico y notó un enorme deterioro tanto en la pintura, como en las calles que conducen al acceso peatonal en la puerta sur de la zona.
El museo de sitio de la zona arqueológica de Tula, Jorge R. Acosta, se cerró al público desde el 9 de agosto de 2018, ante la remodelación, ampliación y remozamiento del mismo.
La obra estaba programada para un año, sin embargo, a dos años y dos meses de haberse cumplido el tiempo estipulado, no hay fecha cercana para la reapertura, puesto que aún le faltan los trabajos de museografía y trasladar las piezas arqueológicas a las vitrinas de exhibición permanente que ocuparán.
La rehabilitación del museo formó parte del programa de Dignificación de módulos de servicios para atención de visitantes y usuarios en Zonas Arqueológicas y Acciones de mejoramiento básico de las instalaciones en Monumentos Históricos y edificios de primer orden, para su conservación y preservación.