Alberto Witvrun. Tulancingo de Bravo.- La jerarquía católica de Hidalgo censuró la aprobación que de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) realizó la fracción parlamentaria de la 64 Legislatura local de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que “cayeron en la trampa y obedecieron a intereses mezquinos” lo que no representa la voluntad de la mayoría de los hidalguenses que en un 82 por ciento son católicos.
El arzobispo de Tulancingo Domingo Díaz Martínez en breve entrevista luego de la conferencia de prensa, expuso que esta medida que va en contra de la vida, tendrá un costo electoral y la población se los cobrará en las urnas, al aceptar que la aprobación “tiene mucho que ver como dice usted con fines electoralistas”, pero como lo decimos en el comunicado como Iglesia no perdimos nada porque los hidalguenses están por la vida.
Lamentó la decisión de quienes en diciembre de 2019 votaron en contra de la ILE y hoy la aprobaron sin consultar la voluntad de la mayoría de los hidalguenses que están a favor de la vida y estimó que con ley o sin ley la Iglesia Católica sigue trabajando convenciendo a la población que se debe preservar la vida sobre todo de aquellos que no tienen la posibilidad de defenderse.
Antes en la conferencia de prensa el sacerdote Marciano Reyes García dio lectura al comunicado de la Provincia Eclesiástica del Estado de Hidalgo y el obispo de Tula Juan Pedro Juárez Meléndez, expuso que no hay claridad en las ideologías de momento y consideró que el relativismo manipula la razón y no se hace el bien porque “no se alcanza el progreso con leyes que atentan contra la vida”
Tanto Díaz Martínez como Juárez Meléndez, anunciaron que pedirán al titular del Poder Ejecutivo, que en un ejercicio de conciencia ejerza su derecho de veto a esta ley, que ataca los efectos no las causas y se pronunciaron por una educación sexual adecuada que evite atentan contra la vida, en tanto difundieron el comunicado donde sostienen que la Iglesia continuará trabajando para evitar el aborto, asegurando que la gran mayoría de los hidalguenses está a favor de la vida.
El arzobispo Domingo Díaz, insistió en esa ley no refleja el pensamiento ni el sentir de los hidalguenses y consideró peligroso que los diputados locales que la aprobaron, consideren “que se vale matar, porque una mujer sufre, porque luego van a decir que se vale matar por el bien de Hidalgo” y subrayó que en el cielo no hay impunidad y ellos se mantendrán promoviendo el bien y la cultura y el evangelio de la vida.