El Instituto Nacional Electoral (INE) en Hidalgo requerirá una ampliación presupuestal para salario de capacitadores asistentes electorales y supervisores, responsables de preparar a los funcionarios de casilla, cuyo contrato terminaba a mediados del mes pasado, informó el vocal ejecutivo José Luis Ashane Bulos.
“En este momento sobre el presupuesto del personal no tenemos ningún problema al respecto, los CAES estaban contratados hasta junio y están laborando y ahí sí tendrá que haber una ampliación. El tiempo que estuvo cerrado se les siguió pagando un salario”, señaló.
Según información previa emitida por el vocal ejecutivo, en promedio se contrataron 800 servidores temporales para los que el INE estableció un salario de 10 mil 191 pesos para supervisores y 8 mil para los CAES.
Asimismo, en la conferencia, Ashane Bulos señaló que el INE firmó un convenio con el Instituto Estatal Electoral de Jalisco para el uso de 40 urnas electrónicas en cuatro municipios, en mismo número de casillas, para que la mitad del gasto -de 2.4 millones de pesos- por la renta sea absorbido por el organismo local y el resto por el INE.
Indicó que existe un “ahorro” porque por ahora no se han impreso credenciales de elector; sin embargo, recordó que este año el INE sufrió un recorte de mil millones de pesos a nivel nacional.
Aseguró que pese a la suspensión de actividades, el Instituto en Hidalgo ha continuado trabajando, incluso en las adecuaciones de los módulos de atención ciudadana, que abrirán el 3 de agosto, con la colocación de acrílicos.
“Hemos estado con gel, cubre bocas, mascarillas para enfrentar la pandemia, hemos tenido dos reuniones con el secretario de Salud del estado para solicitar su apoyo el día de la jornada electoral”, indicó.
Por Oliver García