Tula de Allende. A dos días de la protesta de comerciantes del centro, quienes pedían autorización de la alcaldía para la reapertura de sus respectivos establecimientos, en la demarcación todo pareció haber vuelto a la normalidad, además en recorrido de Vía Libre se observó que la ciudadanía ha relajado las medidas sanitarias recomendadas por los tres niveles de gobierno para evitar contagios de SARS-CoV -2.
Se dio cuenta de que aproximadamente el 10 por ciento de los negocios no esenciales del primer cuadro de la ciudad volvieron a abrir sus cortinas, pese a que el acuerdo con el ayuntamiento fue que se reaperturaría a partir del siguiente lunes primero de junio y que de aquí a esa fecha sólo se revisarían las medidas sanitarias a implementar para abrir de forma “segura” y evitar la trasmisión de coronavirus.
De esta manera, sobre todo en la avenida Morelos se vieron abiertos locales de ropa, deportes, mochilas, bisutería y telas.
Asimismo, cabe hacer mención que en el centro histórico se vieron desfilar a decenas de personas en hora pico que no cumplían con las recomendaciones sanitarias para evitar la propagación de la Covid 19 como portar cubrebocas, guardar el distanciamiento social y quedarse en casa principalmente.
De hecho, tal anomalía la reconoció previamente el alcalde Gadoth Tapia Benítez quien días atrás dijo que Tula se mantenía como el municipio de mayor crecimiento en la curva de contagios porque la ciudadanía no hacía caso de las disposiciones oficiales para evitar el crecimiento de la pandemia.
Por Miguel Á. Martínez