El acelerado avance de los casos de Covid-19 a causa de la renuencia de la población por acatar las disposiciones sanitarias ha provocado que, en menos de cinco minutos se contagian 308 personas y 15 mueran por el virus, lo que apunta que Hidalgo está próximo a pasar a una etapa crítica, expuso el titular de la Secretaría Ejecutiva de la Política Pública Estatal (SEPPE), José Luis Romo Cruz.
“hoy nadie está a salvo” en ningún país, en ninguna ciudad, en ningún lugar “y en Hidalgo lo peor está por llegar”, manifestó en un video el funcionario estatal.
El gobernador Omar Fayad pidió elaborar, con el respaldo del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) y la Universidad de Stanford, la proyección estadística de la pandemia, misma que advierte que en las próximas semanas los casos aumentarán rápidamente y, en consecuencia, el riesgo de contagiarse será mucho más.
Se espera que a mediados de junio en Hidalgo se acumulen 3,400 casos; es decir, cada hora el promedio de contagio será de cuatro personas y con ello los efectos de la pandemia se prolongarán hasta el mes de julio.
No todos han hecho su parte, precisó el titular de la SEPPE, quien citó que el pasado 30 de abril, algunos desatendieron las medidas sanitarias, que hoy son 50 nuevos casos positivos de Covid-19.
“sólo por este descuido, desafortunadamente estos casos potencialmente contagiaron otros más que en los próximos días podrían alcanzar 400 contagiados”.
A pesar que con la activación del Hoy No Circula redujo el 70 por ciento de la movilidad automovilística, no se ha tenido el mismo resultado en la afluencia en parques, centros comerciales y recreativos.
“La recomendación final de los médicos especialistas, es clara y definitiva, sólo tenemos esta semana para evitar que la epidemia se salga de control, escucharon bien sólo tenemos esta semana” para evitar que en Hidalgo colapse la red hospitalaria.
La parte que le corresponde a la sociedad es relativamente sencilla: quedarse en casa, lavado de manos constantemente, usar cubrebocas y mantener la sana distancia.
Por Manuel Casatellanos