Ixmiquilpan.- Dirigentes del Consejo Supremo Hñahñu (CSH), emitieron emergentes llamados, uno para alentar a los indígenas, a fin de que participen en las precandidaturas de presidentes municipales; el otro en demanda de que el Gobierno de México tome en cuenta a ese sector, para que ocupe espacios dentro de la administración pública.
De su lado, el secretario general del CSH, Gregorio Jaen Gaspar, destacó que esta organización social «está al pendiente de los derechos de la población hablante y no hablante de la regiones Valle del Mezquital y de la Sierra de Tenango de Doria».
Por lo anterior, a la población originaria, Gregorio Jaen la convocó para hacer uso del derecho de participar en las actuales precandidaturas, ya sea para presidentes municipales, síndicos procuradores o regidores, «tal como lo establece la convocatoria».
«Ustedes cubren requisitos que el órgano electoral estableció para los 23 municipios de Hidalgo (considerados indígenas)»; por esta razón, señaló que para cualquier asesoría «nos mantenemos a sus órdenes en nuestras oficinas», ubicadas en la cabecera municipal de Ixmiquilpan.
En carta dirigida al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, la dirigente del CSH, Anayeli Mejía Reséndiz, recordó que en los discursos de campaña y de gobierno, del mandatario nacional, siempre ha hablado de la preferencia por los indígenas, como en el punto 1 de los 100 que propuso en su plan de gobierno.
Sin embargo, reprochó que en el CSH «vemos su propensión a favorecer a mexicanos de apellido Ackerman, Humprey, Bartlett, Gatell, Polevsky, Sheinbaum (sic)». De ahí, subrayó que a los integrantes de esa organización indígena «nos gustaría ver también nombramientos de hermanos con apellidos: Tepetl, Toxthe, Xaxni, Che’enì, Chan, Cux, Mezquite, entre muchos otros».
Por tanto, puntualizó que los indígentas también cuentan con preparación académica: «Somos profesionistas con licenciatura, maestrías y doctorados». Cabe destacar, la gran mayoría de simpatizantes y dirigentes del CSH, a la par, es militante de Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Por Arturo G. Alanis