Ixmiquilpan.- Habitantes de la zona centro de esta cabecera municipal demandan la intervención de autoridades de la Dirección General de Transporte Convencional del Estado, con la finalidad de organizar a la brevedad posible a los operadores de distintos recorridos del servicio de transporte colectivo.
Las quejas principales radican en la inseguridad a la que diariamente exponen a los usuarios y a terceros, así como por el cotidiano caos vial que generan a lo largo de las rutas correspondientes, la cual obedece en gran consideración por la indiferencia de las autoridades municipales de tránsito.
Los denunciantes manifestaron que los operadores de estas unidades a disposición de transporte público, por la omisión del reglamento de tránsito entorpecen el paso vehicular en la calle Alarcón de Ocaña, donde está establecida la base, que además de conducir en sentido contrario hacen paradas fuera de las señaléticas establecidas para esta acción.
Mientras que los minibuses de las rutas de la comunidad de Panales y del barrio La Reforma, son señalados por hacer pesado el tráfico vehicular en los alrededores de la base, que está habilitada en una calle muy estrecha, aledaña al arroyo Pallares y contigua a una tienda comercial, donde es constante el paso de automotores particulares y de carga.
Otro punto de atención es la parte exterior del paradero del barrio de San Antonio, pues en ese sector suben y bajan pasaje los conductores de las unidades tipo minivan y minibuses, de diferentes rutas de la zona norte, a pesar de que en el interior de la base cuentan con un amplio espacio.
Además, frente aquel paradero del barrio de San Antonio se encuentra la base de las colectivas que van a las comunidades y zona centro del municipio de Cardonal, por lo cual se provocan verdaderos caos viales en ese sector ixmiquilpense.
Por ello la inconformidad de los habitantes, porque temen que se registren accidentes lamentables por la falta de consideración de los choferes de las rutas antes mencionadas, ante esta situación hacen un llamado a las autoridades locales y estatales correspondientes para acudir de inmediato a una verificación de lo denunciado y obligar a los transportistas a respetar los lineamientos de tránsito y vialidad municipal.
Por Arturo G. Alanis