Alberto Witvrun.-La asistencia a la sesión solemne del 150 aniversario del Congreso Constitucional y Constituyente de Hidalgo del subsecretario de Hacienda y Crédito Público, el hidalguense Arturo Herrera Gutiérrez de quien el Corporativo Grupo Sosa en su marcha del 8 de mayo, pidió su destitución y señaló mediante filtraciones como autor intelectual del bloqueo de las 224 cuentas de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), dejó un mal sabor de boca al Grupo Sosa.
Se atribuía la acción a una venganza, porque hace más de tres décadas los padres del funcionario federal +Arturo Herrera Cabañas e Irma Eugenia Gutiérrez identificados con corrientes progresistas reprobaron que el grupo porril se apoderará de la universidad y cuestionaron el vandalismo que dejó ola de terror en las principales ciudades de Hidalgo.
El Grupo Universidad hoy Grupo Sosa, atribuyó el sobrenombre de Sosa Nostra a +Arturo Herrera e Irma Eugenia Gutiérrez, cuando los autores fueron el ex diputado local, abogado e historiador +José Arias Esteves y el profesor, historiador, poeta y profesor disidente además de ex diputado local Roberto Meza García, durante una jugada de ajedrez que presencie.
Todo por la desesperación de Gerardo Sosa Castelán, a quien cayó como balde de agua fría que Arturo Herrera Gutiérrez viniera en representación del gobierno federal, bastó ver el rostro de Damián Sosa y de Miguel Ángel de la Fuente, no se diga de los diputados sosistas que lo veían con enojo y la “estudiante” enviada a cuestionarlo “preocupada porque eso afecte su desempeño académico”
Dijo, que no estaba enterado, porque la UIF tiene prohibido compartir información; pero sabe que esta se derivó de un alerta internacional, que nadie de Hidalgo tuvo que ver; pero su presencia en Hidalgo del que salió apenas terminó la preparatoria para continuar sus estudios que lo llevaron a ser titular de finanzas en el gobierno del Distrito Federal con Andrés Manuel López Obrador y hoy subsecretario de Hacienda, no fue casual.
Es un mensaje político a Gerardo Sosa, que desafío al gobierno federal y buscó culpables por todos lados, mientras en la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) los representantes legales de la UAEH, empezaron a entregar la documentación para probar que los 151 millones de dólares transferidos de Suiza a México, tienen procedencia lícita y que no hay irregularidades en las cuentas de la institución no solo de las que continúan bloqueadas.