Alberto Witvrun.-El pasado fin de semana se conoció del fallecimiento de Alejandra Mora quien fuera esposa del gobernador Adolfo Lugo Verduzco por consecuencia presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (Dif Hidalgo) de 1987 a 2003 y que dejara huella en la entidad porque impulsó la actividad cultural primero a través del maestro Víctor Suárez y posteriormente facilitando las tareas para la creación del Instituto Hidalguense de la Cultura.
La que por cierto fue polémica porque lo presidió inicialmente el yucateco Jorge Esma Bazán quien no duró mucho en el cargo, pero también por el polémico discurso del profesor +Rafael Cravioto Muñoz quien cuestionó el aldeanismo cultural y llamó a su extinción; pero fue en ese sexenio donde se celebró el Otoño y la Primavera Cultura, con espectáculos de primer nivel, coordinados por Lourdes Parga.
Alejandra Mora era pachuqueña, su padre Benjamín Mora Orta, cuyo nombre esta impuesto a un gimnasio de box en la colonia Plutarco Elías Calles, fue copropietario de la Nueva Arena La Afición que hoy cumple 60 años de existencia y que en otras épocas se convirtió en el principal espectáculo popular que tuvo la ciudad de Pachuca.
Tuvo dos hermanos. Rafael y Benjamín; su familia emigró a la ciudad de Puebla y fue cuando Francisco José Flores Lecona, adquirió la parte de la sociedad de Benjamín Mora Orta, pero siempre estuvieron ligados al deporte espectáculo de la lucha libre porque en el vecino estado se hizo cargo de la arena de la empresa Lutteroth de la Arena México, y su muerte quien se hizo cargo fue su hijo del mismo nombre.
Alejandra Mora también propició la remodelación de los teatros San Francisco y Romo de Vívar (antes Efrén Rebolledo), sin embargo pese a este legado no hubo mención alguna de la secretaría del ramo ni de los grupos y personajes que se beneficiaron con el apoyo que dio a la cultura.